Viernes = Academia Taure. Estaba reventado de toda la semana de curro, pero hay que hacer un esfuerzo para no perder mano ;). Estaba el modelo David Mirás, un clásico de estos viernes, con sus poses acrobáticas y de gran versatilidad (me cuesta recordar que haya repetido una sola pose en todos estos años). Además sabe jugar a la perfección con la iluminación de que se dispone (un par de lamparitas para acentuar el dramatismo de la pose). Yo por mi parte quería darle un enfoque sencillo (keep it simple que dicen los anglosajones), así que me llevé mi portaminas de mina gruesa Faber Castell y el bloc de esbozos de toda la vida. Es decir, los materiales con los que empecé a acudir a estas sesiones de modelo. Y la manera de enfrentarme al papel decidí que fuese más basada en líneas rectas que curvas. Está claro que lo de la expresividad en los trazos ya lo tengo aprendido, pero a veces veo dibujos de figura humana con un encaje y una ejecución a base de líneas más rectas que quedan genial. E igualmente el sombreado decidí hacerlo como antaño, marcando por encima el contorno de la zona de sombra para después hacer una trama en el interior y posteriormente cruzar más tramas en función del valor de gris.
Teniendo esto claro, me concentré en hacer un buen encane de primeras para posteriormente centrarme bastante en el sombreado. Y la cosa fue como sigue
Sin ser una sesión espectacular me gusta pensar que cada vez "acierto" mayor número de poses. Quiero decir que de poses en el caso que nos ocupa, hay un par de ellas o tres que no me convencen. Las demás son muy salvables. Y prefiero fijarme en este aspecto de mi desarrollo, que se puede apreciar en comparación con apuntes de hace un año, por ejemplo. A ver qué se me ocurre para la próxima sesión ;)
¡Hasta entonces!
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