Translate

martes, 30 de agosto de 2016

Me ha costado, pero al final me he puesto a dibujar :)

Vacaciones, vacaciones, lo a gusto que se está de vacaciones, ¡mecagüentó! Nos hemos ido a un sitio de la costa de Barcelona, ya cerquita de Tarragona básicamente a no hacer nada. Con el bebé llegando en Septiembre no teníamos mucha opción, así que nos hemos quedado en un apartamentito toda la semana, cerquita de la playa y en un sitio tranquilo, despejado del turismo masivo y con ambiente familiar.
Han sido días maravillosamente perezosos, de no tener horarios, comer sano, beber claritas, dar paseos,... y redescubrir el milagro del tiempo libre. Quizá sea bueno dedicar un momento a recordar que el trabajo asalariado no es el estado natural del hombre. No. No lo es, amigüit@s. Y uno de los efectos colaterales de no verse en el stress diario del trabajo es que enormes cantidades de neuronas se liberan para poder dar paso a un pensmiento más lúdico. Y con el tiempo libre llegan las ideas, la concentración, la lucidez e incluso alguna epifanía ocasional :). He estado leyendo un libro sobre la Historia de los países africanos desde su independencia, pensando en futuros proyectos, ... y cómo no, dibujando.
Me ha costado un poco ponerme, porque la pereza generalizada quería que dedicase mi tiempo a divagar tranquilamente pero al final, me han podido las ganas y aunque si color, me he puesto a hacer alguna monería:


Este ha sido un primer acercamiento a la playa en la que nos encontrábamos, pero como no tenía la mano caliente y la pluma Sailor no me estaba respondiendo todo lo bien que yo quería, pasé página y me armé con la Lamy Safari:


Y aquí un poquillo mejor. Es curioso que cuando Uno deja de dibujar aunque sólo sean unos días o unas semanas, al ojo y la mano le cuesta más arrancar, pero luego va todo bastante fluido. Aquí intenté rescatar posiciones de los veraneantes, algún movimiento, todo de forma rápida porque en seguida cambiaba la perspectiva. Y sin más, vaya, no nos quedamos mucho más tiempo al sol, así que recogí y ya volveré otro día a ello, rascar y dibujar, todo es empezar.

¡Hasta la próxima!

viernes, 26 de agosto de 2016

Ben Frost para el dibujo de la semana 26





Pues sí, tocaba retrato masculino y a pesar de parecer una cosa fácil de encontrar en la red, me vi negro para encontrar alguna imagen que me llamase verdaderamente la atención. mayormente porque busco retratos con alguna iluminación especial o llamativa, de manera que pueda sacar el máximo partido a los efectos de luz de los pasteles. Estuve investigando diferentes categorías, pero no encontré nada que me dijese: ¡este sí! Al final, ni sé muy bien cómo, di con la siguiente fotografía:


Se trata de Ben Frost un artista de música electrónica que me encanta. Especialmente una canción que tiene llamada 'Nolan' que me parece de otro planeta y demuestra cómo se puede extraer una emoción potentísima de sonidos extremadamente sucios y saturados (que me molan a saco). La verdad es que todo el disco es una pasada. Según sus propias palabras, se trataba de hacer sentir al oyente dentro de un acelerador de partículas. Tuve la oportunidad de verlo en directo y desde luego que la experiencia es casi epifánica: los graves hacen retumbar todo el cuerpo mientras la saturación bloquea cualquier sonido (bueno, casi cualquiera, la gente tiene la extraña costumbre de ir a los conciertos para pasarse toooodo el rato hablando) y llevan al cuerpo entero hasta el desenlace de cada canción.
En fin, que me venía al pelo porque la fotografía está bastante bien y me permitía jugar con la iluminación principal y la secundaria que aparece al borde del contorno facial a la izquierda. Y con esto en mente y las nuevas reglas del juego (1 sólo día por dibujo, más gesto que precisión, etc.) me puse al jaleo:



Incluso el encaje tiene que ser más ágil, puesto que no puedo estar una hora encajando y ajustando: lo cuido todo lo que puedo pero lo que salga, ha salido :). Y viendo que todo estaba más o menos en su sitio, me fui a la parte jugosa:



¡Vengan esas paletadas de color! En este primer momento, la verdad es que ya pinta bien la cosa, el claroscuro está conseguido, si bien hay que seguirlo trabajando, claro. La barba quedó sorprendentemente bien resuelta, atendiendo a la iluminación de la misma y utilizando algo de verde claro para la parte inferior a la izquierda de forma que haya un efecto de iluminación indirecta. Al fondo intenté darle algo de gracia porque era muy neutro, así que por allí desfilaron verdes, magentas, azules, blanco, ... También tuve que parar un momento porque estaba ejecutando todo como en un dibujo de dos días, cuando habíamos quedado en darle más gracia, combinar mancha con línea, en fin, desbarrar un poco, así que fui introduciendo manchas un poco más salvajes (el naranja de la frente) para ir más en esta línea. Y luego continué:



Mas trabajo de cara y barba, la iluminación (espectacular) del cuello que me daba mucho juego, introduciendo muchos más tonos de pastel para hacerlo vibrar. Y no nos olvidemos tampoco de la luz. Cantidades industriales de blanco ayudaron a resaltar las zonas más iluminadas de la parte derecha del rostro. Y vamos avanzando:



Aquí estuve trabajando fundamentalmente la parte de la barba debajo de la oreja, camiseta y fondo. También había algo en el labio que asomaba por debajo del bigote que no me convencía, así que lo estuve moldeando hasta que quedé satisfecho con el resultado. Otro detalle que era importante fueron las arrugas de la frente. Si nos fijamos, en fases anteriores, hay un claroscuro en esta zona que no se entiende muy bien. Fue trazar las líneas de la frente y ajustar este claroscuro y de pronto todo era mucho más claro, cómo si ahí hubiese faltado siempre algo. Y ya llevábamos un par de horas o así cuando me dispuse a rematarlo:



Básicamente era pulir la oreja, la parte izquierda de la barba (a la que reduje un poco el volumen y enriquecí en color) y por supuesto uno de los grandes protagonistas: el pelo. Justo esto es de lo que menos satisfecho estoy, ¡qué le vamos a hacer! A pesar de que las gamas cromáticas con las que he jugado estaban chulas hay algo en la definición del cabello que no me deja a gusto. Este es parte del encanto de dibujar de esta manera un poco más alocada y en cualquier caso el dibujo está bien resuelto, de manera que lo di por finalizado bien a gusto por la capacidad de síntesis para producir una obra así en unas horas. Y ya será hasta el próximo dibujo semanal, probablemente en un par de semanas, ¡que nos vamos de vacaciones!

¡Hasta entonces

jueves, 25 de agosto de 2016

El viaje de Bubu continúa...



Teníamos un capítulo complicado por delante, tanto a nivel formal como de contenido. Se trataba -a nivel material- de contar cómo nuestro querido Bubu había llegado a donde estaba. Complicado, claro, no sé con qué edad leerá esto, ni sé cómo será la educación sexual que reciba, aunque por nuestra parte será lo más clara posible. Así que me limité a las pinceladas mínimas para que entienda que está en la barriga de su madre y que de ahí saldrá para afuera.
A nivel formal, me pareció lo suyo disponer un esquema evolutivo de la barriga y el bebé para hacerlo todo más comprensible y un último dibujo en negro, que destacase más con Bubu antes de salir al mundo. Casi me emocioné cuando lo vi, me parecía ya tan cercano... ¡Coño!¡Como que sólo faltan 4 semanas para que lo tengamos entre nosotros!
Y por lo que respecta a la ejecución del dibujo y ante el chasco de la última vez, porque el papel no aguanta nada (ver este post), pues resolví hacer las manchas justas y necesarias, además de utilizar un trabajo por capas, que en este tipo de cuaderno va a ser más socorrido. Otra cosa que también funciona es utilizar la acuarela para hacer líneas y tramas, de forma que le den un aire diferente, a lo mejor puedo sacar algo en claro haciendo experimentos con esto. De momento os dejo con la doble página terminada:


Ya va cogiendo algo de forma y espero poco a poco irle dando un toque más fluido a nivel de ilustración.

¡Hasta otro rato!

jueves, 18 de agosto de 2016

Empezamos una nueva fase: dibujo de la semana 25



Pues no se ha hecho esperar mucho, ya había dicho que esta semana me iba a poner a dibujar el martes y el miércoles y así lo he hecho, a pesar del calor que ha sufrido un repunte y me ha hecho sudar más de lo deseado. Nada que no se pueda arreglar con un buen ventilador. De todos modos el dibujo es una especie de estado de trance, semejante a la meditación, en el que no se siente ni se padece. Si uno está adecuadamente concentrado en el dibujo puede olvidarse de comer, de dolores o incluso de ir al servicio. Es gracioso a veces acabar una sesión y de pronto sentir el rugido del hambre o la necesidad de mear :).
Pero antes de pasar a comentar lo realizado el miércoles, estuve dándole vueltas al tarro... Resulta que ya vamos casi por la mitad de los dibujos de este año, y me gustaría darle otro aire a la otra mitad (o los que vengan). El pastel ya me es familiar, puedo hacer dibujos muy interesantes con mancha y trama, que me encanta. Pero hay que intentar siempre buscar algo más allá. Imaginemos que me tiro 5 años haciendo este tipo de dibujos... Un poco encasillado ¿no? :). Va en gustos, pero me interesa plantearme algún reto nuevo y llegados a esta altura, he pensado en nuevas reglas para estos dibujos:

- 1 Dibujo por día
- Dibujo con mayor componente gestual que realista
- Inclusión del color del papel en el dibujo
- Recreación de una iluminación y una atmósfera

El tamaño permanece igual, de manera que esto me obliga a sintetizar mucho, pero también a usar el recurso del papel, que puede ser de grandísima ayuda según el caso. Cuando estaba decidiendo esto, pensé en aquel cuadro de Degas que había visto en la exposición de Impresionistas y Modernos. Era espectacular, sobre todo por la economía de medios que no restaba en nada potencia al mensaje. Pues es algo en esa línea lo que me interesa, veremos a dónde nos lleva.
Y ahora sí, con esto en mente, había estado buscando algunas imágenes y me llamaban la atención estas dos:


La primera tiene muchísima riqueza, pero la segunda tenía la gracia de estar en vertical, cosa no demasiado habitual para un paisaje. Sin embargo, me incliné por la primera porque me parecía un buen comienzo para las normas autoimpuestas arriba mencionadas. Y tras pasarla al formato de trabajo -que sigue siendo 65 x 50 cm- y elegir un papel color salmón, hice un encaje a grosso modo, que la imagen tampoco permitía más:




Sólo situar los elementos principales, ya que si íbamos a trabajar con un dibujo y trazo más gestual, no merecía la pena meterse en detallitos en este momento. De ahí pasamos a un primer estadio del trabajo:



Aquí se puede apreciar el trabajo en la línea que quiero seguir. El cielo es más una mancha multicolor y con trazos verticales en la parte izquierda, por ejemplo. No voy a utilizar un tramado de líneas de color que vaya haciendo el efecto de degradado de esta zona. Me gusta mucho trabajar así con los árboles del dibujo. Es mucho más efectivo hacer una mancha de blanco sobre la que aparecen valores medios y oscuros o al revés en los del fondo, hacer una mancha marrón sobre la que se perfilan zonas en verde de valores medios y algunas otras en azul celeste de tonos más claros. Pero ya iba intuyendo que la forma y textura del fenómeno atmosférico de la aurora boreal me iba a dar trabajo:



Aquí podemos ver un primer momento en el que intenté resolver esta cortina de tonos verdes, pero no me satisfacía porque encontraba algo demasiado lineal en el resultado. también le dediqué tiempo al cielo, para igualar tanto el color como el trazo, ya que la parte derecha tenía un predominio de horizontalidad. Ya estaba bastante avanzado el asunto, pero había que hacer la parte del suelo y terminar de trabajar esta nube de luz:



Lo primero la aurora: ante la impresión de un exceso de líneas, decidí tomar las barritas de pastel por el lateral para que hiciesen manchas más difusas y difíciles de controlar. Y fue así que llegué a un resultado aceptable, alternando claros y oscuros. Una cosa que se me ocurrió para perfilar mejor la forma de este fenómeno, fue utilizar un color magenta-rosa para demarcar el límite entre la luz verde y el cielo circundante, sobre todo a la derecha de la imagen. Me funcionó bastante bien y luego pasé por encima con un trazo ancho y suave de blanco que también fui distribuyendo por el resto de la aurora.
Era momento de pasar al suelo, perfilar algo mejor los árboles, trabajar los reflejos en la nieve. Estos tienen mucha gracia, porque se logran a veces yuxtaponiendo un azul celeste o más oscuro para las zonas de sombra y un naranja (complementario del azul) con algo de amarillo. Y luego pasar a hacer los abetos nevados, a base de manchas blancas y de verde + marrón oscuro. Y no le di muchas más vueltas. Cierto, se me olvidaba comentar una cosa como ayer casi se me pasa hacerlo: ¡había que poner algunas estrellitas en el firmamento! Unos toques de blanco y de azul celeste y ya estaba todo apañado.
Y esta ha sido mi primera experiencia con los dibujos semanales hechos en una sola sesión, en el próximo episodio tendremos que pasar a retrato masculino, a ver qué tal se da.

¡Hasta entonces!




miércoles, 17 de agosto de 2016

Lunes y martes diseñando mi ex libris (en el curro, claro)


He pillado bastante carrerilla con esto de la caligrafía y el Ex Libris con el curso de Ricardo Rousselot en Domestika, así que el Lunes y ayer he estado liado en el curro (por supuesto) con ello. Ahora que ya he mandado todos los deberes al profe, tengo que hacer un "proyecto final", un Ex Libris con un montón de rasgueos e historias que me voy a tener que currar yo solo. ¿Y qué demonios es un Ex Libris? Se preguntarán vuesasmercedes. Pues la verdad es que a mi tampoco me quedaba muy claro a la hora de empezar el curso, pero en esta última vídeo lección más o menos lo he entendido. Se trata de algo así como una marca personal que se pone a modo de sello o pegatina en los libros, para demostrar la posesión de los mismos. La verdad es que no tiene mayor misterio y aunque alguien se quede con un libro tuyo, como dice Rousselot, pues tendrá que ver ahí para siempre tu nombre XD.
En fin, tras elucidar esto y bajarme los materiales complementarios de cómo efectuar los rasgueos, las florituras y demás me puse a intentar algunas cosillas:


Aquí calenté un poco la mano escribiendo "Antares", la estrella también conocida como el corazón del escorpión por hallarse situada en el centro de la constelación de este signo. Probé a hacer la 'a' de otra manera, utilicé varios rotuladores y colores, etc. para ver si iba saliendo algo por donde pudiese tirar. En la página de la izquierda empecé a hacer mi nombre para el Ex Libris, ensayando varias posiciones y colocación de las letras. Con todo ello fui intentando nuevas aproximaciones:


Como escribir un poco más en diagonal, ir incluyendo rasgueos y pensar en la forma del contorno del Ex Libris, que pueden adoptar mil y una formas, aunque de entrada podríamos partir de un óvalo. El que se ve escrito en negro ya iba apuntando maneras, pero había que incluir un montón de rasgueos decorativos y aquí mi imaginación y destreza fallan. Así que le dediqué el martes a ello ;):






Se puede ver con qué rigidez intenté administrar algunos de estos ornamentos con más pena que gloria y además empecé a darme cuenta de que también tenía que aparecer por allí la palabra 'ex libris' y no sabía muy bien dónde ponerla :P. Pero en un segundo intento salieron cosas medio graciosas:



Y como ya estaba algo aburrido de tanto narcisismo, escribí varias veces un verso que había escuchado en una de las últimas canciones de C. Tangana, intentando componer las letras y las palabras con algo de gracia:



Bueno, no es la panacea pero demuestra que algo de conocimiento sí que he adquirido haciendo este curso. Tiene pinta de que va a ser un hueso durillo de roer esta última parte del curso, pero vamos a darlo todo y a ver qué sale ;).

¡Hasta la próxima!

Semana 24, acabamos otro ciclo de dibujos





Esta semana me había propuesto dibujar un montón el martes y miércoles como he hecho otras veces, así que empecé por terminar (¡bonita paradoja!) el dibujo de la semana 24. Tras haberlo rumiado con paciencia, había visto unos cuantos puntos débiles que me disponía a subsanar. Y comenzamos:


Lo más urgente para mi era "atemperar" el reflejo del caracol en el agua. Me había quedado muy parecido con el color del caracol, de manera que le robaba protagonismo y la mirada se dirigía hacia ambos por igual, mientras que yo quería restar protagonismo al reflejo. Hice algo que aprendí hace mucho aquí en Barcelona, en una academia creo que ahora desaparecida en la que el profesor tapaba con su mano ciertas áreas del cuadro para poder ver bien de qué color se trataba en cada caso. Fue así como viq ue en el reflejo había un predominio de colores verdosos y azulados que trasladé allí para generar el efecto deseado. También oscurecí un poco esta parte del agua, que me había quedado demasiado clara. Ya que estaba por la zona, me curré la parte de vegetación o musgo en la que está apoyado el caracol, así como el reflejo de la seta. Era hora de pasar al protagonista:



En este momento dediqué mis modestos esfuerzos en hacer el caracol, corregir un poco la curva de la concha, oscurecer algunas zonas y darle a la seta una variedad cromática más amplia. Sospechosamente fácil, me dirigí entonces hacia lo que temía me pudiera dar más de un dolor de cabeza: la gota de agua y las ondas sobre la superficie líquida:





Y el caso es que al final tampoco fue taaaan complicado, era cuestión de fijarse bien en los colores que allí se mezclaban. Como siempre, no hay un color "agua", igual que no hay un color "oro", ni "plata", ni "carne". Las superficies reflejan la luz que les llega y a veces les llega luz reflejada de otros cuerpos, con lo cual había en esta parte del agua una amalgama de violeta, azul celeste, marrón claro, marrón oscuro, verde azulado oscuro, blanco, amarillo, verde claro e incluso algún magenta. Un festín para la vista que traté de reflejar y que quedó muy resultón. Unos buenos toques de blanco en las zonas de máxima luz y nuestro dibujo estaba casi a punto. Sólo faltaban tres toques en la superficie del agua y en el fondo para resituar todos los valores de color y con esto lo di por acabado.

¡Hasta el próximo!



sábado, 13 de agosto de 2016

Viernes corto en el curro, vamos a hacer unas frases en cancilleresca...





Cuando a Uno se le mete algo en las castañas (como diría mi querida madre), no para hasta darle fin. Es lo que tiene, amigos, así es que también el viernes encontré mi ratito de asueto en el trabajo para poder ir haciendo una frasecita:


Muchos habréis reconocido que se trata del inicio de Cien años de Soledad, de Gabriel García Márquez. Es un libro que me marcó muchísimo en la época, por todo, la forma en que escribe el arriba mencionado, la estructura del libro, el realismo mágico, el repaso por la historia latinoamericana, etc. Es uno de aquellos libros que marcan un antes y un después en la Historia de la Literatura, vaya ahí mi humilde opinión. Y tanto la primera como la última frase del libro son de una potencia abrumadora, así que era una buena motivación para practicar la caligrafía cancilleresca. De hecho me comí una palabra por el camino, pero no altera el sentido de la frase. Aproveché para hacer unas pocas florituras e ir soltándome con esto.
La cosa no quedó ahí: luego por la tarde tuve un ratejo para ponerme a hacer lo mismo pero ya con la pluma Speedball y con la tinta hecha a base de nogalina en papel malucho, que es lo mejor para soltarse. y estuve buscando algunas frasecitas en latín que caligrafiar:



Queda chulo, pero se nota que hay que calentar la mano, como puede verse a continuación:





Probé a hacer la misma frase de Cien años de soledad con la pluma y fue una gozada, muy fluido todo. Para rematar hice la primera frase de La metamorfosis de Kafka, otro libro que me encanta:





Y de paso me tiré a la piscina e intenté hacer algo que nunca había probado, doblando el grosor de las letras. Así que este fue mi viernes, aunque ahí no quedó la cosa...

¡Hasta ahora!

¡¡Un capítulo más en el viaje de Bubu!!





El viernes estuve avanzando un paso en esta empresa que me he propuesto y que me llevará tiempo, pero creo que va a ser muy guay. Se trata de la libreta que le estoy haciendo a mi futur@ hij@, con cosas que quizá le puedan interesar sobre este momento y estos meses antes de nacer. Tocaba explicarle de donde viene el nombre provisional con el que lo vamos tratando: Bubu.
Ya lo había explicado en otro post así que allí me remito. Aquí comentaré algo que me ha parecido una auténtica faena y que tiene que ver con la libreta Leuchturm1917. Había escuchado entre los dibujantes que este tipo de libretas no tienen mucha salida y no entendía por qué, el papel es fantástico (200 gr/cm2), blanco inmaculado y la libreta en sí es bastante robusta y con colores muy chulos. Pues bien, todo esto pensaba yo hasta que al hacer este nuevo dibujo, tras plantear a grosso modo el Taj Mahal con un lápiz de color, le fui a meter acuarela. "Una buena aguada para el cielo" pensé con regocijo. Y ahí fue cuando amargamente descubrí que el papel no estaba preparado y saltaba a la segunda pasada de pincel con mucha cantidad de agua. Supongo que no debe estar diseñado como el de acuarela que suele incluir algodón en la composición y enseguida empezó a levantarse  y prácticamente traspasó hasta la siguiente página. Me llevé un chasco fino. De verdad que me fastidia cuando una cosa parece estar bien hecha y ser resistente y a la mínima de cambio pasan estas cosas. En ningún sitio había leído nada referente a que el papel no fuese indicado para acuarela y lo di por sentado. Ahora tengo que revisar mucho mejor cómo hacer cada capítulo para no dañar el cuaderno y que no quede feo (en otro contexto me daría igual, pero la idea es hacer algo con un acabado medio limpio). En fin, tendremos que verlo como un reto. Debajo de estas líneas el dibujo terminado:


A pesar de lo arriba mencionado, ha quedado chulo y el toque de sombreado para las letras les da una presencia brutal. Me gusta también que he dejado la imagen del fondo lo suficientemente diluida como para que no interfiera con el texto. Así que ahí lo dejo y voy a ir revisando lo que quería hacer ne próximos capítulos para ver de qué manera afrontarlo, visto el tema de la acuarela.

¡Hasta la próxima!

viernes, 12 de agosto de 2016

Semana grande de caligrafía, otra tanda el jueves





Venga, ¡que no pare la fiesta de la caligrafía! También hoy he estado dándole caña al asunto para poder colgar en el foro de Domestika mis progresos:



Esta ha sido la versión que he enviado, con el Pilot Parallel Pen de 3.8 mm y tinta roja, que me encanta. Cierto es que la punta es bastante rígida y no es lo mismo que escribir con la plumilla, pero me cumple bien la función. estoy contento con letras como las mayúsculas 'A' y 'D' por ejemplo, y con cómo van fluyendo las cosas.
De hecho y para rematar la faena, me vi el siguiente vídeo en el que se anima a los alumnos a escribir frases enteras con esta caligrafía. No pude resistir la tentación de hacer una primera aproximación:





¡Qué guapo! Se trata de ir escribiendo mientras se hace algún arabesco o rasgueo o firulete o como Vds. quieran llamarle para adornar la escritura. Se puede observar asimismo cómo la 'd' cambia radicalmente la forma, según lo visto de la mano de Ricardo Rousselot. Así que como se ponga así la cosa, mañana seguiré y de paso cuelgo esto como práctica, para ir avanzando en el curso.

¡Hasta otra!

jueves, 11 de agosto de 2016

Comenzando el dibujo de la semana 24



Último dibujo de esta nueva serie de pasteles, que por tanto tiene que ser un animal. Y había pensado originalmente en un lemur, por motivos prácticos, a saber, no disponía de ciertos colores (aquellos que no se hallan presentes en el pelaje del lemur XD) y que quería hacer algo un poco diferente. pero esto es así, si no se encuentran fotografías que nos motiven, mejor no forzar la cosa. De manera que empecé a pensar en utilizar una foto de un insecto o algo así. Y luego me vino a la cabeza un tema con bastantes posibilidades: un caracol. Parece sencillo y muy tonto, pero encontré fotos geniales de caracoles y de entre todas me quedé con este wallpaper:




Soberbio por la iluminación y el dema del agua, que me puede dar mucho juego, habida cuenta de lo que le gusta a la gente pintar el agua y ver el agua pintada (no deja de ser llamativo, como si captar ese juego de reflejos y refracciones fuese un tema en sí; ¿quizá tenga que ver con la fragmentación de nuestra sociedad, de nuestra imagen de nosotros mismos, de nuestro entorno? Preguntas para otro rato...)
La pena es que era una foto muy alargada e iba a perderse información:




Pero al final no fue tan malo, se veía lo que se tenía que ver y quedaba chulo. Y tras elegir un papel naranja, para enmarcar la imagen, me hice un buen encaje:




Bastante concienzudo, porque no podía permitirme el lujo de hacer un reflejo en el agua a las buenas de diox, así que me apoyé en un sistema de referencias que iba trasladando a la imagen reflejada, que aún así creo que es más grande que el original, pero de momento me funciona. Lo mismo hice con la gota de agua, cuyo reflejo ya de inicio quedó descentrado. Lo corregí un poco y con estas indicaciones me fui a por el color:



Y no se dio mal la cosa, a pesar de que iba escatimando con el blanco porque no me quedaba mucho. esta tarde iré a comprar más y también azul ultramar oscuro. Al final lo más complejo y he de reconocer que con esto siempre tengo problemas, era dar la forma correcta a las ondas que crea la gota sobre la superficie del agua. Si Uno se pasa de grosor, enseguida se nota que algo rechina por ahí. En fin, salvé bien la situación, si bien veo ahora que quizá tendrá que volver sobre ello. Los colores bastante bien para ser la primera sesión. Y luego hice el claroscuro general del caracol, la seta, la vegetación y el reflejo. Lo mismo digo, que para una primera fase es más que suficiente, lo único que el reflejo me está molestando, porque creo haber utilizado una gama de colores que hace parecer que se encuentra fuera del agua. tengo que mirar mejor los valores de cada tono que tenga que utilizar en esta zona para que quede todo más coherente. En cuanto pueda le doy fin.

¡Hasta la próxima!







miércoles, 10 de agosto de 2016

Y ahora yes very well Manuel: ¡terminamos el dibujo de la semana 23!





¡Venga amigo, vamos a ello! Ayer fue el día elegido para poder acabar con este dibujo. Claro, desde que no tengo cursos por las tardes tengo algo más de tiempo para los dibujos semanales y eso hace que vaya a buen ritmo y ayer un unas 2 horitas y tal pude terminar este desnudo. E hice bien, porque de haberlo querido terminar en la última sesión, todo parece indicar que habría quedado mucho menos pulido. Esto me hace recordar las palabras de Esteve. Hay un momento que la obra ya tiene un magma, una entidad, una cantidad de trabajo que hace que respire por sí misma, y es en ese punto cuando se le puede dar la forma definitiva y dejarlo acabado.
Así que empecé allí donde lo había dejado el día anterior: en las piernas y subiendo por el brazo:


Hay algo en este dibujo que me instaba a meterle color. La fotografía original tiene unos tonos muy neutros pero en los que mis ojos iban viendo matices de verde, violeta, carmín de garanza, azul celeste, etc. Y según iban apareciendo ante mi, no podía por menos de dejarlos plasmados en el papel. La combinación es rara pero funciona y me ilumina correctamente los diferentes puntos del dibujo, destaca los volúmenes correctamente, los contornos son limpios, y en general no rechina. Así que decidido a continuar en esta tónica pasé a la zona del torso:



Igualmente había una mezcla allí de colores que a pesar de no ajustarse (para nada) a la imagen de referencia, tenía un encanto especial, como si fuese una vieja pantalla de televisión. Me costó un poco la zona de los pliegues abdominales, pero quedaron bastante ajustados. Ya sólo quedaba la parte del cuello y la cabeza:



¡Y he aquí cómo transformar a un señor de facciones asiáticas en uno occidental! No sé exactamente cuál fue el matiz que llevó a esto, pero curiosamente la cara no es la de la fotografía, aunque se mantienen los valores de color iguales y los volúmenes también. El pelo fue un trabajo muy divertido de manchas con blanco y azul oscuro sobre las que ir luego trazando "pelos" con azul celeste, gris o blanco y algo de verde para que no quedase tan sosete. Quizá se le podía haber metido más marrón por lo de los oscuros, pero me gustó de esta manera porque se diferenciaba muy bien del cuerpo. Una leve pasada al fondo para difuminar un poco la presencia de la zona más clara alrededor de la figura y lo di por finalizado. Sigo mirándolo y me parece curiosísimo lo de los colores, no encajan pero a la vez encajan, toda una paranoia. El caso es que como conjunto funciona perfectamente y es una forma de dibujar interesante. En fin, vamos a por el siguiente, a ver si me puedo poner esta tarde.

¡Hasta el siguiente!




Miércoles por la mañana, aprovechando el tiempo en el curro




Llevo un montóooooon de tiempo con este curso de Domestika, y aunque me encanta, me había estancado por falta de tiempo y práctica. Así que sin más, esta semana me he puesto las pilas y voy a ver si acabo el curso antes de que nazca el bebé. Para ello me he visto forzado, obligado, compelido, incoado, coaccionado y ante la ineludible necesidad de utilizar el tiempo del curro para ello. Es jodido, no se crean Vds. porque cada vez que levanto la cabeza después de una sesión de caligrafía tengo que aterrizar, porque me voy leeeeeejos, lejos.
Así que sin más, estuve practicando las mayúsculas y minúsculas en la escritura cancilleresca mediante la escritura de nombres, empezando por la 'A' y acabando por la 'Z'. Primero hice una prueba con nombres que me iban viniendo a la cabeza:


Y ante los fallos evidentes, como por ejemplo al escribir 'Fernando' o 'Hans', decidí mirarme otra vez el vídeo correspondiente a este apartado para hacerlo con los nombres que daba el bueno de Rousselot:



Ahí fue cuando entendí que no se trataba de hacer caligrafía como en el cole: por ejemplo, lel final de una 'u' y el comienzo de una 'm' no van unidos por una línea, sino que la primera acaba abajo y la segunda empieza arriba, sin unirse. Eso y la posición de algunas consonantes respecto a las minúsculas que la siguen fueron valiosas lecciones aprendidas con este nuevo visionado del vídeo. Seguiré practicando, que tengo que colgar este ejercicio en Domestika.

¡Hasta la próxima!

martes, 9 de agosto de 2016

Retomando la caligrafía ¡que ya está bien!

Mucho hacía desde el último día que me puse en el curro a hacer algo de caligrafía, pero gracias a lo que sea, el ritmo ha bajado lo suficiente como para permitirme estos lujillos. Además -pensé- he empezado este curso con el amigo Rousselot en Enero de este año ¡Enero por el amor de diox! Y creo que va siendo hora de avanzar y terminarlo. Así que me hice un par de alfabetos para ponerlos en el foro del curso en Domestika:



Y luego un ejercicio de letras con la misma morfología que también se pedía como requisito para poder seguir avanzando:


Me sorprendió la fluidez con que resolví ambos ejercicios, o sea que no he olvidado todo de golpe ;). Ahora me queda por delante hacer nombres utilizando mayúsculas y minúsculas, a ver si mañana tengo tiempo.

¡Hasta otra!

Lunes con Bubu



Los lunes suelo ir al gimnasio, pero como ya comentaba en otro post, entre que es Agosto, estaba ligeramente contracturado del cuello y con una pereza suave, me quedé en mi casita con mi mujer a hacer cosas y dar un paseo. Cuando llegué a casa, pensé que ya estaba bien de pereza y que tenía que continuar con el libro de nuestro bebé. Y me hice esto:

A partir de una fotografía de un bebé encontrada en internet, decidí hacer un dibujillo con lápices de colores, porque me vino así a la mente y pensé que era una buenísima opción para darle a la estampa un aire más acogedor (no se me ocurre una mejor palabra :)). Luego con un rotulador de caligrafía que tiene la punta blanda fui haciendo líneas para oscurecer progresivamente el marco del dibujo, para lo que me ayudé de los propios lápices de colores y también de los rotuladores calibrados. Al final quedó chulo, con una iluminación muy simpática. Era ya sólo cuestión de aderezar todo esto con algunas letras y explicaciones sobre este capítulo, que quedaron bastante simpáticas para lo malo que soy yo con estas cosas. Así es que querido/a hijo/a, continuamos explicándote el mundo lo mejor que podemos, espero que te guste.

¡Hasta el próximo capítulo!



jueves, 4 de agosto de 2016

Miércoles con el dibujo de la semana 23

Hice un esfuerzo extra para poder acabar este dibujo el miércoles, que es mi día de dibujo. Sólo que este miércoles tenía que limpiar y eso me comió bastante tiempo de la tarde (¡ah! ¡Las rutinas! Inyectándose poco a poco en los intersticios de la vida para, poco a poco, ir haciéndose con el tiempo libre, tal como ocurre con aquellas hierbas que crecen entre las baldosas de la calle). Así que esta vez contaba con un par de horas para continuar con el desnudo masculino empezado el martes y además algo de cansancio por las tareas caseras. Ya os adelanto el resultado: no pude acabar el dibujo. Eran cerca de las 23 h cuando me pregunté si aguantaría hasta las doce de la noche y siendo honesto conmigo mismo me dije que no, porque sería una pena ir al galope para finalmente no poder darle el acabado cuidadoso que este dibujo está pidiendo a gritos. Pero hicimos cosas muy interesantes que no deben ser desdeñadas:


Tuve que trabajar bastante el fondo, que era una de las cosas que más me molestaba, con aquel color marrón tan insulso. Había ido a Barna Art a hacerme con más pasteles y ya sin el corsé de la austeridad, pude explayarme a saco con un buen trabajo de tramado para dar a entender las diferentes capas de iluminación del fondo. En un principio mezclé varios colores para darle más vibración al color de base que rodea a la figura, magentas y violetas fueron bienvenidos. Pero no obstante, se veía demasiado todavía el desastre de la sesión anterior, así que continué en esta línea. Por otra parte, tenía que hacer algo con la figura, así que a base de un concienzudo trabajo de rescatar los blancos y utilizar sólo colores bastante suaves, fui delimitando las principales masas de color sin entrar en demasiado detalle:

Luego fui haciendo un degradado a base de trama desde las zonas más oscuras del fondo, pertenecientes a las esquinas de la imagen  hasta la parte contigua al cuerpo del bailarín, para lograr un efecto de iluminación menos brusco,. En un principio había utilizado un azul celeste para esta última parte, pero en última instancia me pareciío exageradamente claro, y lo fui cubriendo progresivamente con el ultramar desaturado (con mucha carga de blanco) que se ha convertido en un imprescindible de mi paleta. Es util para estos tonos medios de oscuridad, así como para zonas de sombra que no queremos machacar con un color muy oscuro. Y ya con esto solucionado pude pasar a lo que me dio tiempo del cuerpo:





A saber, las piernas, los pies y la mano del modelo, aparte de blanquear algunas zonas del cuerpo en las que me había pasado de oscuro. A la hora de ir consiguiendo los tonos medios, no podía contar con el naranja y sólo a medias con el ocre amarillo, de manera que me decanté por utilizar tramas muy sutiles de violeta y azul ultramar claro, que quizá en una fase posterior voy a trabajar con más ocre amarillo para que estas superficies se asemejen más a la piel y menos a la piedra ;). Todo esto se puede apreciar mayormente en las piernas, el brazo con la mano del fondo y la mano de primer plano. Se puede observar que aumenté el tamaño del pie. Y ello por el siguiente motivo: viendo con perspectiva la pierna estirada me di cuenta de que el muslo era muy cortito y en principio pensé que me había confundido al encajar. Pero resulta que estaba bien, lo que pasa es que debido a la perspectiva, la pantorrilla y el pie eran más grandes en la imagen. En principio el pie había quedado muy raquítico y no estaba en consonancia con esta ilusión espacial, así que lo engrosé y trabajé sucintamente los dedos y las sombras del mismo, en un ejercicio que no dejó de asombrarme por la verosimilitud de esta zona a pesar de los limitados recursos utilizados.
Como ya adelantaba al principio no pude acabarlo, creo que habría sido un poco precipitado y prefiero darle un buen final a este dibujo, así que en cuanto pueda me pongo un par de horas y a por ello.


¡Hasta entonces!

miércoles, 3 de agosto de 2016

Empezamos perezosos con Agosto: Dibujo de la semana 23

¡Buah! Entre el calor sofocante de esta ciudad y que he ralentizado el ritmo de todo, desde el curro hasta los cursos -y subsecuentemente el dibujo- pues como que da un perezal de cuidado el ponerse a hacer cosas. No obstante, y dado que llevo un ritmo bastante interesante con los dibujos semanales, decidí ponerme ayer martes al lío con un nuevo dibujo, el que correspondería a la semana 23 y de temática desnudo masculino. El problema fue que me lié a hacer otras cosas y con temas de la casa y al final me vi en una vorágine de dibujo en la que sólo contaba con una hora, hora y media para poder dar un primer toque a esta obra.
Vamos allá: de modelo había tomado la siguiente foto de internet:


Ya lo he comentado varias veces, pero hacer búsquedas en la red con las palabras "desnudo", "masculino", "modelo" y demás suele conducir en muchas ocasiones a páginas más tirando a porno, que no es mi foco de atención. Hasto de búsquedas infructuosas, decidí ir intentando otras posibilidades. El último dibujo de desnudo masculino lo hice basándome en una genial foto de un asana de yoga. Y tirando de ese hilo, pensé en utilizar también la danza como núcleo de esta nueva pesquisa. Y salieron cositas, sí señor. No de muy alta calidad o en tamaños no todo lo grandes que me gustan para trabajar, pero había historias chulas. Y fue así que me decanté por este bailarín, en el que la pose destaca ciertos músculos y la pierna toma una perspectiva muy interesante. Los colores apagados eran un estímulo para controlar más la paleta cromática a utilizar. Cierto es que no es un desnudo en sentido estricto, pero la franja del calzón que se ve no me parecía ser obstáculo para desechar la imagen. Así que la pasamos a nuestro formato de trabajo (50 x 65 cm):


Y ya podíamos ponernos a trabajar, primero con un sólido encaje:


La dificultad de este dibujo reside en que no se podían tomar apenas referencias desde el borde del papel y todo tenía que ser hecho por líneas de aproximación. Hay una cosa que me está funcionando mucho últimamente cuando me veo en estas tesituras: tomo el difumino y lo alineo con la línea (valga la redundancia) de la imagen que quiera transportar al papel. Después, con cuidado, giro hacia el papel sin mover la mano y trazo la línea donde corresponde, prestando siempre mucha atención a la inclinación del difumino. Y la verdad es que me da muy buenos resultados. Luego continué con la faena:


Hasta incluir todo el contorno de la figura. Había elegido un papel muy claro, color hueso y me empezaba a arrepentir del pastel que estaba utilizando para el encaje, un azul ultramar rebajado que quizá me iba a dejar rastros muy oscuros teniendo en cuenta la claridad de ciertas partes del cuerpo. Pero como ya no era cuestión de parar, me lancé a terminar el encaje:





Ya de entrada podría jurar que hay algún desfase con la pierna extendida y el pie se me hace pequeño, pero quiero trabajar un poco más el dibujo antes de corregir esta parte. Y a darle una pasadita al fondo:


No queda muy bien, y me da el aspecto de algo hecho deprisa y a carrera, demasiado marrón y muy simplón, sin matices, sin vibración. El desastre mayor llegó luego. Toda vez que el encaje estaba más o menos conforme, me vi con poquísimo tiempo y falta de algunos pasteles que se han vuelto fundamentales en mi paleta, como el azul de Prusia o el verde oscuro y eso me desestabilizó un poco el curso del dibujo. De forma que hice una pequeña catástrofe:

También cuenta que acostumbrado a papeles de colores no sabía muy bien cómo actuar con este color de papel, estaba un poco perdido. Así que me limité a cubrir el fondo con lo más oscuro que tenía a mano y marcar con manchas generales las diversas zonas del cuerpo, aunque el resultado fue sucio y peligroso, porque hay mucha zona que luego tendré que recuperar con blanco y ya vimos en el pasado que no es muy buena idea llevar el blanco encima de zonas que han sido tocadas con colores más oscuros... En fin, veremos.




¡Hasta otra!