El domingo nos fuimos a comer a un sitio muy chulo en el Born, un barrio bastante turístico pero con encanto en Barcelona. El sitio en cuestión se llama Blue Project y forma parte de una fundación. Es un crudivegano (creo) con unos platos espectaculares, especialmente el hummus y el falafel me parecieron sabrosísimos. Total, que estábamos esperando que nos trajesen la comida cuando detecté algo peligroso en las cercanías: ¡un pote lleno de pinturas! Erán básicamente parecidos a los plastidecor de toda la vida, pero más gruesos y ya desgastados por el uso, pero el material es lo de menos. Eso en combinación con los manteles de papel semejante al kraft era una combinación genial, así que me llevé el pote a la mesa y empecé a dibujar.
El motivo estaba claro, tenía a mi mujer enfrente haciendo cosas al móvild, de manera que estaría en la misma posición un rato, así que rápidamente hice un encaje y luego fui combinando colores para llegar al resultado siguiente:
Bueeeeno, mi mujer es evidentemente mucho más guapa ;), pero me gustó la frescura del dibujo y gracias al papel kraft, con un poco de blanco se podían resaltar -aunque difícilmente- las zonas más claras. Pero lo que realmente fue súper divertido era amenizar la espera dibujando. Luego ya nos trajeron la comida y los platos tapaban en parte la "obra de arte":
Y una vez terminamos, allí se quedó el mantelito para la gente del blue project o para la basura, ¡que hay que desapegarse de las cosas! Para la próxima vez que vayamos allí, ya tengo cómo pasar el rato, muahahahaha.
¡Hasta otra!
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