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jueves, 8 de enero de 2015

¡Feliz año nuevo! Dibujo de la semana 1/2015

Estimados lectores, asiduos y/o no tan asiduos, ¡bienvenidos a un nuevo año de mi blog! Diciembre ha sido sin duda un mes desastroso pero alegre y ello ha propiciado una lacerante falta de entradas en el susodicho blog. Primero fueron los preparativos para las Navidades, luego las Navidades en sí, que he pasado con mi mujer en Portugal, cerca de Lisboa y en Madrid. Dentro de las Navidades han sido los catarros y dentro de los mismos (cual si esto fuese una miniatura de Locus Solus) la fiebre maldita que ha alcanzado los 39 grados en el peor de los casos. Todo esto para explicar que me ha sido virtualmente imposible sacar el tiempo y/o/u las ganas para dibujar, ni que fuese un apuntecillo. y eso que me había llevado material de sobra para hacer alguna tontuna. ¡Ains!, es así la vida.
Es por ello que este trimestre me he apuntado a varios cursos de dibujo y pintura, con lo cual los martes iré al Espai d'art, los jueves al curso de Iratxe en el Centre Cívic Urgell, los viernes a dibujar del natural en la Academia Taure y los sábados (aquí la novedad) me he apuntado a un curso de Urban Sketching, que tenía ya ganas de engancharlo. Aparte he visto cosas realmente interesantes en el Meetup de Barcelona, y puede que alguna de ellas caiga, hehehe. Así compensaremos la relativa monotonía de los últimos meses en el blog, en los que han predominado los dibujos semanales. Además tengo en mente algunos libros que comentar (ahí está el amigo John Berger con otros títulos muy suculentos) y con ello creo que ya cubro el cupo de objetivos y buenos deseos para este 2015 que seguro será un gran año.
¿Y cómo comenzar los dibujos semanales del 2015? ¡Vaya pregunta! Pues cambiando de técnica. Vamos a pasar al carboncillo y a los papeles de 35x50 cm primero y los de 50x70 cm después, ¡a lo grande! Sí claro, muy bonito todo, pero... ¿qué pasará con los dibujos semanales que han quedado pendientes del 2014? Bien, aquí viene la parte que roza la demencia (o la fantasía): voy a intentar sacar algo de tiempo para poder irlos haciendo al ritmo que sea para así lograr llegar a la semana 52 del 2014. Alea jacta est.
Volviendo al dibujo de la semana 1, ayer estuve escogiendo fotografías en blanco y negro de paisajes que me pudiesen servir a tal efecto y tras hacerme con algunas, me decidí por la siguiente:

Tiene un equilibro de claros y oscuros que me gustó y me pareció no demasiado complicada para comenzar con el carboncillo. Así que la dispuse en un formato proporcional a 35x50 cm:

La diferencia es casi imperceptible, un milímetro o así. Luego procedemos a comenzar el dibujo. Ahora bien, hemos cambiado el formato y también el papel, un Guarro especial para carboncillo. Y este papel es bastante fino y se dobla con extrema facilidad. La solución pasa por asegurarlo con cinta de carrocero a una madera:


Como se muestra a continuación:


Y ya es cuestión de empezar a dibujar. Otra novedad de dibujar de esta manera es que lo haré de pie, en vez de sentado como venía siendo habitual. Para ello me serviré de un caballete de mesa:


Y empezar el encaje:

Hay algo raro en este dibujo. A pesar de haber ajustado la imagen a un formato proporcional a 35x50, he encontrado muchas dificultades para ajustar el encaje. Bien podría ser el haber perdido algo de mano durante estos días, pero es algo más. Me parece que la caseta de la izquierda de la imagen es demasiado grande en el dibujo y asimismo, las montañas no me parece que estén ajustadas a la imagen de referencia. Aún así vamos a continuar por este camino a ver qué sacamos en claro:


Y es aquí donde lo dejé ayer. No quedo muy convencido, porque la posición de las piedras del murete inferior no me parece correcta y aparte, he empezado el dibujo con mucha voluntad de detalle y creo que precisamente voy a tener que prescindir bastante de ellos y hacer un tipo de dibujo más gestual.
Lo que es de destacar al dibujar con carboncillo es lo siguiente:

- Se cubren con facilidad amplias superficies
- Hay que tener mucho cuidado con las zonas más iluminadas, porque la mancha de carbón es muy potente
- El encaje me resulta mucho más fácil de hacer, ya que se puede utilizar la parte lateral de la barra para hacer líneas rectas de mayor longitud
- El difuminado en superficies es muy agradecido :)
- En una fase posterior, se puede utilizar una goma de miga de pan para sacar luces (una ventaja muy interesante respecto al grafito)

Hoy seguramente pueda sacar otro ratillo para ver por dónde avanzar este dibujo e ir cogiendo más mano con el carbón. En cualquier caso, he de reconocer que me encuentro más cómodo haciendo desnudos o retratos que haciendo pasiajes, pero hay que trabajarlo "todo a la vez".

¡Hasta la próxima!








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