¡Toma playa de postal! No, en serio, lo de la playa de Shrittanu al lado de la que nos quedamos no era normal. Teníamos una playita entera casi para nosotros, con una ocupación mínima y con la suerte añadida de que hacía un tiempo bastante bueno. Casi demasiado, porque no se podía aguantar muy bien el calor en la arena y además el agua no refrescaba ¡estaba calentorra!
En fin, uno de estos días, y por no perder práctica me llevé las cositas de dibujar y me puse con las acuarelas a sugerir el paisaje. la cosa me convenció hasta tal punto que finalmente decidí no meterle línea ni rotulador ni nada:
Me empecé a fijar en cómo hacer el cielo de una manera más realista y efectiva, y no cubrirlo todo de azul uniforme, por ejemplo. Y empecé a entender (algo hizo 'click' en mi cabecita) que teñir el cielo con acuarela tiene mucho más que ver con los espacios vacíos que con el color. Es decir, que se trata de saber dónde dejar huecos blancos para sugerir las nubes y no tanto de dibujar las nubes con color. Recuerdo que Fortuny, por ejemplo, hace unos cielos a la acuarela soberbios con apenas cuatro manchas, eso sí, puestas donde tienen que estar. Y esa es la línea que decidí seguir. Hay un pequeño gran defecto en la zona de la arena, que consiste en que al seguir la forma de la playa con una pincelada curva de ocre muy diluido, da la impresión de que hay una parte de la playa en cuesta. Intenté corregirlo, pero no fue posible y así quedó la cosa. Muy graciosas quedaron las cabañas del fondo, aunque lógicamente se podría haber resuelto de otra manera.
¿Seguimos?...
En fin, uno de estos días, y por no perder práctica me llevé las cositas de dibujar y me puse con las acuarelas a sugerir el paisaje. la cosa me convenció hasta tal punto que finalmente decidí no meterle línea ni rotulador ni nada:
Me empecé a fijar en cómo hacer el cielo de una manera más realista y efectiva, y no cubrirlo todo de azul uniforme, por ejemplo. Y empecé a entender (algo hizo 'click' en mi cabecita) que teñir el cielo con acuarela tiene mucho más que ver con los espacios vacíos que con el color. Es decir, que se trata de saber dónde dejar huecos blancos para sugerir las nubes y no tanto de dibujar las nubes con color. Recuerdo que Fortuny, por ejemplo, hace unos cielos a la acuarela soberbios con apenas cuatro manchas, eso sí, puestas donde tienen que estar. Y esa es la línea que decidí seguir. Hay un pequeño gran defecto en la zona de la arena, que consiste en que al seguir la forma de la playa con una pincelada curva de ocre muy diluido, da la impresión de que hay una parte de la playa en cuesta. Intenté corregirlo, pero no fue posible y así quedó la cosa. Muy graciosas quedaron las cabañas del fondo, aunque lógicamente se podría haber resuelto de otra manera.
¿Seguimos?...
No hay comentarios:
Publicar un comentario