El otro día tuve que ir al centro de salud (aka CAP) por unas analíticas, que parece que desde que volví de la India, el estómago me baila sardanas cada vez que como. Total que como me tocaba esperar un poco, empecé a fijarme en la cantidad variopinta de gente que se acumulaba en la sala de espera. Y lógicamente, se me vino a la mente la idea de dibujar a unos pocos de ellos:
Al final me tocó antes de o previsto y no pude tupir la hoja de apuntes, pero están graciosos. Me gustan especialmente los de los señores mayores en la esquina superior izquierda. En el caso del muchacho de pie y la muchacha (ambos con el móvil, maravilloso invento que individualiza al máximo y hermetiza para crear consumidores ideales) tuve en cuenta las proporciones, tanto del cuerpo como de la cara y el caso es que voy notando cierta estructuración en la cabeza a la hora de calcular las dimensiones de los dibujos, lo que es importante.
Ayer, aunque fue un día más durillo en el curro, saqué un mini instante para hacer un retrato imaginario:
Empecé por hacer la cara, como se puede apreciar por el cálculo de proporciones. Pero luego, le empecé a meter pelo, y el cuello, y el cuerpo... Y al final, no sé por qué capricho del inconsciente (si es que tal cosa existe) me apeteció hacer unas palmeras a los lados de una carretera y unos taludes y/o acantilados, que finalmente se convirtieron en una especie de iglesia. Creo que son reminiscencias de Goa o Varkkala :). Y bien, sin más, parece que ya consugo resolver una cara en cada vez menos trazos, lo que es importante a nivel de economía del dibujo. Mejor no marear mucho un dibujo que se puede acotar en pocas líneas.
¡Hasta otra!
Me parece precioso el de la niña del pelo azul el collar, los detalles del vestido etc muy bonito.Los dibujos en la agenda para que comentar.Bs Chelo
ResponderEliminar¡Madre! ¡Qué estás comentando en el sito que no es! XD Gracias a ti y a papá por vuestro apoyo.
ResponderEliminarUn beso fuerte