Ayer viernes, me tocaba hacer corto, pero finalmente me tuve que quedar un rato más porque no estaba mi compañera y tenía que encargarme de sus cosas. Eso significaba quedarse a comer. Y eso significaba también que podía aprovechar el rato de la pausa para intentar dibujar alguna cosa aprovechando que tenía los bártulos para la sesión de modelo de la
Academia Taure que después colgaré ;). Dicho y hecho, me fui a un banco cercano a la mole de cemento en la cual curro y tenía una perspectiva simpática de algunos árboles y bancos. Así que me puse a ello:
Y así quedó la cosa. Empecé haciendo los bancos y luego los árboles. Pero no fue hasta que hice las líneas del enlosado y hasta que situé las sombras sobre el mismo, que el apunte tomó coherencia y una sensación de profundidad bastante interesante. Y de esta manera, la verdad es que da gusto acabar una semana.
¡Hasta la próxima!
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